May 20, 2007

La versión más larga de mi historia

Yo conocí de Dios y me bautizé el 21 de enero, 1996, en Cincinnati, Ohio EE.UU. Estuve muy feliz allí en el ministerio universitario de la iglesia de Cristo Internacional en Cincinnati, y encontré por la primera vez en mi vida una verdadera alegría.

Siendo estudiante fui por un trabajo de unos meses en Nueva York en 1999, y conoci por primera vez a gente latina. Los latinos me cayeron muy bien, y cuando tuve la oportunidad de viajar a México al graduarme en 2000, la tome.

Mi viaje a México fue planeado para durar cinco semanas, pero me gustó mucho México y al final me quedé allí ya unos cuatro años y medio, y aprendí entonces bien el español además lo que aprendí cerca de la cultura mexicana y la vida misma. Fue un momento muy bonito y agradable en mi vida.

En 2005 estaba pasando por un momento muy difícil espiritualmente, y decayéndome cada vez más y más. Empezaba a haber más y más pecado en mi vida. Hasta estaba en peligro mi membresía en la iglesia. Y otra vez volvía a sentir el vacío en mi corazón que se había quitado al bautizarme.

Fue entonces en este tiempo que encontré la página de la iglesia de Portland, y me alegré mucho al encontrar sermones predicados por Kip McKean, para bajar gratuitamente. Bajé algunas y me los puse a escuchar.

Fue una revolución en mi corazón. Empecé a sentir fe otra vez en mi corazón, y una alegría y gratitud por ser cristiano.

Mientras de repente por mano de Dios me quedé sin trabajo, y no regresaba y no regresaba con la que era mi novia.

Pero aun no estaba seguro que hacer, ya que no tenía dinero para ir a visitar a Portland, regresar, y luego mudarme allá o a otra ciudad, como por ejemplo a Cleveland, donde vive mi familia carnal. Pero al platicar con mi papá, quien ni es discípulo, él me aconsejó a orar. Me sentí avergonzado porque aún no había puesto la situación en oración, pero en unos pocos minutos de oración se me aclaró todo, y decidí mudarme a Portland.

Tuve amigos que no estuvieron muy de acerdo, y de hecho mi decisión me costó amistades. Aunque por lo menos me apoyó Josué Ortega en mi decisión.

Decidí perder los últimos dos clases del diplomado bíblico que estaba tomando, y me subí con mis pocas cosas a mi carrito viejito para emprender el viaje de tres días y medio.

El primer domingo que fui, estaba de viaje Kip, y fui a conocer el ministerio latino y a Victor Gonzalez. Victor me convenció a quedarme en el ministerio latino, y luego empezaba a juntarse conmigo para ayudarme a restaurar mi relación con Dios.

(Al principio iba para estar cerca de Kip, y al final por meses ni una sola vez le escuché predicar. Chistoso, ¿no?)

Luego me invitaron a ir a Phoenix, Arizona a empezar un ministerio latino como parte del equipo misionero en la nueva iglesia con Matt y Helen Sullivan. Fue un tiempo excelente, mi primer experiencia como misionero. Allí Dios puso en mi camino a una chica que estaba buscando a Dios, ella empezó a venir a la iglesia y estudiar la Biblia. Felizmente, ella se hizo discípula y fue bautizada en Cristo.

Pero Dios tuvo otro plan para mí, y me llamaron regresar a Portland para seguir entrenándome para la misión en Los Angeles.

Y ahora estoy aquí en el condado de Orange (Orange County), en la área metropolitana de Los Angeles, como el único soltero en el ministerio latino. A pesar de los retos, yo sé que Dios va a seguir bendiciendo igual que siempre. El enemigo quiere distraer de muchas formas y es una lucha dura para mí mantenerme bien enfocado en la obra de Dios, entonces ya que estás leyendo esto, te pido que te acuerdes de mí y a los demás en tus oraciones.

1 comment:

  1. Carlos,
    Soy como tu. Una gringa que quisiera aprender más de ministerios latinos y la cultura latina. Desde una niña me gusta el español. Soy soltera y una madre de cuatro hijos. Please excuse my imperfect spanish. I'm still learning. Cual es la mejor manera que puedo aprender la idioma y la cultura si ahora no puedo viajar a un país latino?

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